Quiche de calabacin, Idiazabal y tomates cherry

Mi historia con la masa de la quiché es como una peli de sobremesa de sábado, una autentico culebrón que al final tiene final feliz. Y es que he preparado muchas veces esta masa que ya tiene tres generaciones de historia. El problema estaba en que nunca salia bien del todo, unas veces no se cocía por la parte de abajo, otras se rompía y se desmigaba al cortarla, otras se me quemaba por intentar hacerla antes de poner los ingredientes, como os decía, una autentica aventura. Como todo en esta vida era cuestión de práctica, y ya después de muchas veces de hacerla, por fin la controlo. Ahora me ha dado por probar otras variedades de quiché, y creo que estoy ante mi favorita junto con la de puerro y bacon. Pues nada, sin mas dilación, he aquí esta estupenda quiché de calabacin, cherrys y queso Idiazabal.

Ingredientes:

Para la masa:

150 gr. de mantequilla

300 gr. de harina

pizca de sal

2 chucharadas de agua

Para el relleno:

200 ml. de nata

150 gr. de calabacin

tomates cherry

100 gr. de queso Idiazabal rallado

3 huevos grandes

sal y pimienta

Elaboración:

Cortaremos en dados el calabacin, y lo sofreímos con un chorrito de aceite en una sartén. Mientras se nos hace el calabacin, prepararemos la masa. Derretimos la mantequilla y le añadimos la sal y el agua. A continuación añadimos poco a poco la harina hasta mezclar bien la masa, y la dejamos reposar durante el tiempo que tardemos en preparar el resto de ingredientes.

Cortaremos los tomates cherry en cuartos y los añadiremos al calabacin. Por otro lado batiremos la nata, con los huevos, sal pimienta y agregaremos el queso y el sofrito de calabacin y tomates cherry.

Entonces pasaremos a trabajar un poco la masa y la extenderemos sobre un molde de base desmontable cubriendo hasta los bordes. Verteremos la mezcla anterior y lo llevaremos todo al horno.

Primero lo tendremos en el horno solo por la parte de abajo a 180ºC unos 30 minutos, y cuando veamos que los bordes de la masa están colorados, señal de que la masa esta casi hecha, encenderemos el grill y lo tendremos otros 15 minutos hasta que se nos gratine a unos 200ºC.

No me quiero despedir sin contaros el porque de poner unas cucharadas de agua a la masa, es muy simple es truco de mi abuelita, que decía que así no se desmiga la pasta, nada mas, espero que os haya gustado esta magnifica versión de la clásica quiché.